Bienvenidos al blog Crónicas Aldeanas, creado por Félix Anesio, para la difusión de mi obra literaria y la de todos aquellos que deseen colaborar. Asimismo, servirá para la promoción de otras manifestaciones artísticas y culturales.

Tale of Two Villages, created by Felix Anesio, for the promotion of my literary works, as well as any other participants who wish to collaborate. Also, this blog will promote other artistic and cultural manifestations.

miércoles, 30 de junio de 2010

"Minotaur", a poem by Sonia Diaz Corrales, translated into English by Manny Delgadillo

In Crete there was once

A king who had a minotaur

That follows me to every place,

And with me rushes headlong into emptiness

And complains about the perpetuity of its monstrous head.

The only solution is in my own fear,

In the need to lend it my own head

So that the minotaur could see the world

And learn of its flu and its anxieties,

Of its alarming brilliance.

Knowing at last

That every single head is a small monstrosity

And that in the end,

A labyrinth may always exist.

"Minotauro", un poema de Sonia Diaz Corrales.



Una vez en Creta

un rey tuvo un minotauro

que me sigue a todas partes

y se precipita conmigo al vacío

y se queja de su perpetua cabeza de monstruo.

La solución está en mi miedo

en la necesidad de prestarle mi cabeza

para que minotauro vea el mundo

sepa de sus gripes y ansiedades

de su alarmante brillantez.

Sepa en fin

que toda cabeza es una pequeña monstruosidad

y que al final de todo

siempre puede haber un laberinto.

lunes, 28 de junio de 2010

"Soliloquio quasi loquio", un escrito de Félix Anesio, cuando visitó New York por primera vez.



--Estoy que echo chispas. Este hombre fue a Ellis Island a visitar a "su chica francesa” y no me invitó. Diantres!
--Cómo que no lo invité? Es usted ciego o se hace?
--Y quién es usted que se atreve a interpelarme en medio de mi frustración? Qué cosas dice?
--Cálmese senor, cálmese y mire bien la foto, mire bien. Yo lo veo a usted al lado de de mí, a la derecha de la foto. Y por si fuera poco, mírese como sonríe de felicidad...
--Será que estoy perdiendo la visión, como Borges? Hmmm… Pero quién rayos es usted?
--Soy su alter ego. Tengo derecho a hablarle así y alterar su visión quijotesca de las cosas para su propio bien.
--Bueno, bueno, si es así ya estoy más tranquilo. Acaso debo agradecerle?
--No lo creo necesario. Es mi deber.
--Está bien, no se hable más del asunto. Siga usted con lo suyo que yo iré a lo mío, si es que algo puede ser mío. …Quizás un día nos encontremos ya, frente a frente, y trataré de que nos entendamos.
-- (?)

Luego siguió un largo silencio reverencial ante la estatua.

sábado, 26 de junio de 2010

Un poema de la joven escritora cubana Dayne Gertrudis.


10 Días

Flaquea el último escudo y piadosa desciendo a la miseria
De los temblores que me escalan, y besan como trazas
La luna que guardo sedienta, para cuando ya no estés.

Un dolor de botella destruye las formas de los libros que pudieron ser,
Lo común facilita los destrozos, harapos que preciso en el aliento de los signos.
Una mano como estación y nunca perecer ante la nueva prórroga de quedarte.
El ciego recuerdo de las caricias ausentes para tus labios, la paradoja de tu lenta
Lluvia cayendo sobre mis pechos, e ir cruzando miedos que llevan a tu despedida.

No lágrimas de esta mercader estriada de aguardos, brújulas exijo para incurrir
A oscuras en la traición de los silencios y las horas que aún manejo para cualquier cama.

Quiero la tumba de la noche o el lodo del invierno, celebro la estación que amo con migajas.
Quiero encender fósforos para esta época y tibiar el alma con arándanos
De sentido y sombras de tu cuello. Repliego el dolor tierno de tu aparición
Y amanezco de nuevo en otros labios que caen como helechos sobre tu cuerpo retirado.

Aforismos/Aphorisms, de/by Felix Anesio

"Reconocer nuestra ignorancia es dar un paso adelante en el largo camino hacia la sabiduria."
("To recognize our ignorance is to take a step forward in the long road to wiseness.")

"Deep and malignant forces continously sorround me; this is when I feel most sincere, and I hold my pen with gratitude and formality. I breath... I write..."

"La vida ha de ser como un caballo desbocado, azaroso, y feliz; soltar las riendas, he ahi la clave."

jueves, 24 de junio de 2010

Recommended Reading: Carson McCullers's novella "The Ballad of the Sad Café"--Loneliness and Longing in the American South


Carson McCullers's phenomenal prose shines throughout this magnificent novella. The level of poignancy and verisimilitude is transmitted with poetic evocations and a stunning, thorough outline of characters. Miss Amelia, the rough, stubborn, overtly Southern woman, who owns a distillery in "a dreary town", has come across a hunchback named Cousin Lymon, whom she takes into her own house, eventually falling in love with him. Yet Marvin Macy, her ex-husband, has just gotten out of a penitentiary in Atlanta, and is out hungry for revenge. Meanwhile, Cousin Lymon and Miss Amelia open up a small café where the people in the small town can gather and, without any remorse whatsoever, "forget the deep bitter knowing that you are not worth much in this world..." There is a tinge of the Southern Gothic style that came to define the great American writers from that region, something like the overt fascination with the grotesque and the anomalous. Furthermore, McCullers's sensual conjuration of scenes is evident in this short work, as when she writes: "It was such a night when it is good to hear from faraway, across the dark fields, the slow song of a Negro on his way to make love." And even her description of a chain gang singing while laboring under the sun is meritorious writing: "One dark voice will start a phrase, half-sung, and like a question. And after a moment another voice will join in, soon the whole gang will be singing. The voices are dark in the golden glare, the music intricately blended, both somber and joyful. The music will swell until at last it seems that the sound does not come from the twelve men on the gang, but from the earth itself, or the wide sky..." Buy at http://www.barnesandnobles.com/

Recommended Viewing: "Red Desert"--director Michelangelo Antonioni's masterpiece about modern alienation and the effects of an industrial landscape


"Red Desert", out this week on the Criterion Collection (a collection ranging over 500 titles on DVD), is Antonioni's first color film. It carefully delineates the neurosis of a middle-class woman, Giulana (portrayed by Antonioni's muse Monica Vitti), whose husband works in the nearby power plant. The setting is an obvious pretext for the contemporary desolation and angst associated with the progressive age, and the industrial setting, replete with a multicolored panorama, is one of bleak apprehensiveness. Intense reds, blues, and yellows form part of the provocative cinematographic setting, while Vitti's intense red hair flurries about her twitching face in reflection of her inner frenzy. Antonioni is able to capture the alienation inherent in one's soul by a simple pan of the camera, focusing on an electrical tower or an abandoned fishing cottage, or by an extreme close-up of a nervous Monica Vitti. This film could be deemed pessimistic, yet it sums up life in the postmodern world, and the effects it has overall on the individual. With Richard Harris. Buy at http://www.amazon.com/

sábado, 19 de junio de 2010

"Coral Gables Blues", fragmento de una pieza corta, que dialoga con otras en el libro "Crónicas Aldeanas".


Salí afuera solamente para contemplar las copas de los árboles tocándose unas a otras. Los árboles danzaron, se mecieron, se tocaron. A ratos, las hojas partían de los inquietos árboles y se encontraban unas con otras en medio del aire, como dos amantes en una tempestad de pasión. Sentí la inclemente brisa desordenar mi cabello. No me molestó. Incliné mi cabeza hacia atrás, todo cuanto pude, como una antigua sacerdotisa invocando a un dios, y miré fijamente a dos pájaros punteando la cúpula azul. Dos pájaros suspendidos en el aire por unos segundos, por una eternidad. Gradualmente, el vibrante sol se tornó rojo sangre, como una creciente célula carmesí. Mi pecho palpitó con un aliento vital. Mis ojos, heridos por lágrimas, reflejaron la añoranza de un sol más meridional. Ruido de autos. Música irreverente retumbó desde una casa cercana. Madres vociferaron con alarmante egotismo, a sus hijos que jugaban como pequeños indios emplumados.“Romy, Romy,” me llamó mi propia madre, “ven, ven a ver las noticias...” Un avión perturbó al mundo con discordante agitación. Pero todos esos ruidos, una contienda a mi visión, no fueron suficientes para impedir el torrente de quietud que derramó su vehemencia sobre mi alma que espera...

"Coral Gables Blues", a fragment of a short literary piece, directly linked to other stories from the book "A Tale of Two Villages", coming soon.


I went outside only to contemplate the tops of the trees touching each other. The trees danced, swayed, touched. Sometimes the leaves would depart from the disquiet trees and reach for each other in mid-air, like two lovers in their tempest of passion. I felt the inclement breath ruffle my hair. It did not bother me. I bent my neck backwards, as far as I could, like an ancient queen invoking a god, and stared at two birds dotting the blue dome. The birds hovered in the air for seconds, for eternity. Gradually, the vibrant sun became blood red. Like an overgrown crimson cell. My chest heaved with a breath of life. My eyes stung with tears that reflected the sorrowful southernmost sun. Cars honked. Irreverent music blasted from a nearby house. Mothers yelled in frightful egotism to their children playing like little feathered Indians. “Romy, Romy,” called my own mother, “come look at the news.” An airplane wrought the world with ferment discord. Yet those noises, a strife to my vision, were not enough to impede the stream of tranquility which poured its vehemence onto my waiting soul….

jueves, 17 de junio de 2010

"Momentum", una viñeta del libro "Crónicas Aldeanas" en español.


Escuchó varios pasajes musicales que provenían de la casa elegante, detrás de los setos. Cada sonido parecía estremecerlo, enseñarle algo, algo muy dentro de sí. Sus nervios se tornaron tensos; el pelo de la nuca y de sus brazos se erigió rígido, encumbrado. Su repentino, voraz fervor, esparció mil sensaciones punzantes —como saetas— en su alma, en su pecho, en su cabeza. Las notas del piano se agolparon muy dentro de sí, creando conmociones, y la vez, la clara percepción de una develada pasión virginal. El sintió cada nota, cada nota, en un rapto de emoción, en cada trozo de su carne renovada. No sabía nada de corcheas o semicorcheas o compás de tres por cuatro o de silencios o arpegios o tempo o ritmo o armonía… Pero él ansiaba conocer…

"Momentum", a short story by "A Tale of Two Villages" co-author Manny Delgadillo



He heard several strains of music coming from the elegant house behind the hedge. Each sound seemed to wrench and teach something, something inside of him. His nerves became tensed; the hair on the nape of his neck and arms stood lofty and rigid. His sudden, voracious ardor spawned a thousand prickly sensations in his soul, his chest, his head. The notes of the piano swarmed inside of him, creating commotions and the perception of an unveiled virginal passion. He felt each note, each note, in a rapture of emotion, in every piece of his renewed flesh. He did not know anything about quavers or demisemiquavers or clefs or about silences or arpeggios or tempo or rhythm or harmony… But he longed to know…

Entrevista concedida a Armando de Armas, de Radio TV Martí, 06/17/2010


Crónicas Aldeanas
El escritor cubano, Félix Anesio.

(Martí Noticias, A. de Armas) - Félix Anesio, Guantánamo, Cuba, 1950. Graduado de ingeniero por la Universidad de Oriente en 1975. Emigró en el año 2000 hacia Estados Unidos y reside actualmente en la ciudad de Miami.

Su primera obra literaria fue el relato Una Ciudad Cinematográfica, publicada por la Revista Alba de la Arquidiócesis Guantánamo-Baracoa. Con motivo de la reciente aparición de su libro Crónicas Aldeanas, que forma parte del Cuban Heritage Collection de la Universidad de Miami, Armando de Armas entrevista a Félix Anesio para MartíNoticias.

MN. ¿Qué papel ha jugado el cine en su vida?

FA. El cine ha tenido una importancia capital en mi vida. Se sabe que los sueños moldean el carácter y la formación de la personalidad; el cine me ha hecho soñar sueños indelebles que han marcado mi ser para siempre. Claro, no sólo el cine, sino también la música (estudié piano), la literatura, y otras artes. El cine evolucionó en mí desde el válido entretenimiento indispensable, hasta el goce estético mayor, así como en la consolidación de los valores éticos y morales. Esto último referido sobre todo al cine de alto vuelo, el de arte, por supuesto, donde deseo destacar a los grandes maestros como Fellini, Bergman, Buñuel, Antonioni, Welles, Tarkovsky… Nada como el buen cine en la formación del individuo como ente social.

MN. ¿Y en su literatura, cómo ha influido el cine en su literatura?

FA. ¡Tremendamente! Tanto así, que incluso en algunas de mis obras, donde no se habla del cine, no obstante, los personajes, las situaciones, y los conflictos han sido previamente imaginados, visualizados cinematográficamente. Del mismo modo, y conservando las prudentes distancias, pudiera decir que sería inconcebible una parte importante de la obra de Cabrera Infante ("La Habana para un infante difunto"), de Bioy Casares ("La invencion de Morel", inspirado por la actriz de cine Louise Brooks), de Manuel Puig ("El beso de la mujer araña") y otras, que hubieran sidos imposibles sin el elemento cinematográfico. De seguro, ellos estarían de acuerdo con este planteamiento mío, porque así lo siento: somos deudores del séptimo arte.

MN. ¿De las salas cinematográficas que menciona en su libro Crónicas Aldeanas por qué el Cine Astro es el preferido?

FA. Bueno. Cada sala cinematográfica que hay en el mundo - incluidos los menos poéticos cineplexes-, tiene cada una su propio estilo, su propio carácter, hasta su propio olor. En mi caso, el Cine Astro, el más humilde cine de barrio de mi ciudad natal, pienso que tomó un alto relieve probablemente consolidado por el principio martiano, "Con los pobres de la tierra quiero yo mi suerte echar…" Yo personalmente, puedo prescindir del lujo y el oropel en este caso y en general; siempre voy hacia lo sencillo.

MN. ¿Entre pieles rojas y caras pálidas sigue apostando aún por los pieles rojas?

FA. Claro que sí! Apuesto por todas las minorías sobre la faz de la tierra, que aún son objeto de discriminación, segregación, o cualquier otro tipo de atropello. Definitivamente, siempre seré un piel roja… jajaja

MN. ¿Cómo maneja el tiempo en su libro? ¿Hay una sucesión de tiempos intercalados o la permanencia de múltiples tiempos al unísono?

FA. Manejo el tiempo de una manera poco convencional. Creo que no son tiempos en que el concepto lineal de un pasado que discurre hacia un presente, y quizás pueda proyectar algo del futuro -que siempre es incierto- sea el más válido recurso para mis cuentos. Hay hechos que no se pueden enmarcar en un tiempo justo y propio; situaciones que ocurren de una manera desfasada, fracturada, dislocada y que aún se pueden volver a repetir luego. Visto el tiempo desde el contexto de su propia relatividad, decidí romper estos esquemas lineales, para provocar en el lector inteligente (la inmensa mayoría lo son) un algoritmo cómplice, donde libremente pueda recrear su propio concepto de la obra, y haciéndolo partícipe de esta dinámica espacio-temporal. El lector tiene la verdadera opción de tener la última palabra sobre este libro conceptual, en que cada pieza dialoga con otra (s) y que a la vez constituyen un todo.

MN. ¿Qué anécdotas del poeta Regino Boti le sobreviven en Guantánamo?

FA. Boti falleció en 1958. El, antes que yo y antes que muchos, nombró a mi ciudad "aldea natal". Justa ironía propia de la estirpe de esos lares; pero hay algo curioso que sí quiero destacar: cada vez que visitaba a una de mis tías, torcía camino para pasar frente al caserón de la Calle Bernabé Varona esquina a Martí, y que a mí se me entojaba mágico, y como si vislumbrara su alma en el aire, recitaba silenciosamente algunos versos que permanecen por siempre en mi memoria. Uno de ellos: "Es cariño de toda mi existencia esa vecindad…" y "Aldea, mi natal aldea, término que clavó entre el mar y la montaña la flecha siboney." Estos versos, y tantos, le sobreviven no sólo en Guantánamo, sino en todo el país y aún en la diáspora. Tuve una relación de amistad con su hija Florentina Regis Boti, también abogada como su padre; mujer de carácter fuerte y auténtica, ya lamentablemente fallecida.

MN. ¿Qué extraña de Guantánamo?

FA. La parquedad de sus calles rectas y amplias, hoy rotas-no importa. La amabilidad de su gente linda y culta. Las esquinas donde me robé algún beso furtivo bajo la complicidad de una farola fundida; ver el sol salir de entre las montañas cada día desde mi terraza; los momentos en que fuí muy feliz a pesar de… Siempre habrá un a pesar que no amerita expresarse.

MN. ¿Cómo se relacionan Guantánamo y Miami?

FA. Unir geografías puede ser una tarea titánica pero hermosa a la vez. Y la inspiración no te perdona cuando te agarra fuerte; yo no pude ni tuve razones para desobedecer el mandato. Y ahí está el resultado: mis lectores lo corroboran y me envían amables y apasionados comentarios; muchos se ven reflejados de algún modo en los cuentos. Pueden estar en Brazil, disfrutando el libro; puede ser en Uruguay; en New Jersey, California, España, Republica Dominicana, y la propia Cuba, donde nuevas generaciones de lectores justifican esta correlación y les agrada. ¿Necesita más razones, señor periodista…?

La presencia de la Base Naval de Guantánamo desde siempre ha influenciado ambas culturas, en ambas direcciones…, y ahora dolorosamente también recuerdo que perdí muchos amigos en el intento, en esa frontera de campos minados que todos conocen, y que durante muchos años fue el único camino desesperado y arduo hacia Miami.

MN. ¿Sería aventurado decir que Guantánamo tiene la única porción de tierra libre que existe en Cuba?

FA. Estoy en desacuerdo con esa suposición, dado que estamos hablando de un enclave militar. Todo lo bélico afea y dificulta el concepto de una tierra libre, salvo las excepciones históricamente conocidas de guerras necesarias de independencia, etc. De todos modos, no hay tierra totalmente libre en sí misma, sino en la conciencia de sus ciudadanos. Para este pensamiento, acudo a Saint-Exupery, quien dijo: "Se que sólo hay una libertad: la de pensamiento." ¿Recuerdas El Principito?

MN. ¿Regresaría para vivir a un Guantánamo, a una Cuba totalmente libre?

FA. Soy árbol transplantado inexorablemente del cuál han nacido frutos en esta nueva tierra: dos nietos y uno en camino lo preconizan. Por lo tanto, sería bien difícil para mí hacer hipótesis sobre esta posibilidad del regreso. Pero en mis sueños me veo muy viejito, sentado en el portal de una rústica casa, a la orilla de un mar color amatista, que muchos saben donde queda...

MN. ¿Quién es Félix Anesio?

FA. Félix es uno, … es dos, … es todos los hombres y mujeres de buena voluntad, que no se nutre de odios ni rencores, y que desea lo mejor para la comunidad cubana y en general la hispana; que convive y crea por el progreso de su familia y de este gran país, pero que recuerda día a día la patria que lo vió nacer y desea para ella una vida más feliz en democracia.

Después de estas preguntas, si usted me lo permite, quisiera añadir sólo unas breves palabras de agradecimiento antes las muestras de cariño de mis lectores. Igual agradezco a la crítica especializada por su apoyo a mi libro "Crónicas Aldeanas". Y me conmuevo cuando algún lector me dice "yo soy parte de ese libro", "el libro tiene sutilezas que le dan un aire misterioso", etcétera, y lo releen, y ya piden una segunda edición que habrá de salir próximamente también en inglés.

Fragmento del cuento "Susan Parodan", que pronto se publicará en la segunda edición de "Crónicas Aldeanas"


Hay un tramo de tierra, de varios kilómetros de extensión, que corre paralelamente a una autopista cercana, dónde sobresalen escuálidos, deformes y cenicientos troncos de árboles a ambos lados de los autos que pasan vertiginosamente. Esta tierra no tuvo siempre tan horrendo aspecto: la tormenta la hizo así. Kilómetros y kilómetros de pálida y mórbida fealdad emergen a lo largo del trayecto, mientras nadie desea siquiera echarles una simple mirada. Esta tierra está marchita, diría yo, erosionada por la vesania del viento, la lluvia, el trueno y el tiempo.
Era el veintitrés de agosto de 1992. Todas las ventanas en la ciudad habían sido tapiadas, las puertas selladas, los refrigeradores repletos, las veladoras listas, innumerables cerillas y encendedores en todas las gavetas, las baterías colocadas en los fustes de las linternas amarillas, las latas cruzadas con abridores, los radios portátiles convenientemente dispuestos en las salas; hijos e hijas y madres y padres sentados rígidamente como cuerpos momificados, frente a las pantallas de los televisores; el ojo se apostaba cada vez más y más cerca, mientras las casas semejaban las sombrías barracas de un enorme campamento sitiado.

miércoles, 16 de junio de 2010

Excerpt from "Susan Parodan"-- A Short Story from the Book "A Tale of Two Villages", Coming Soon


There is a tract of land, of several miles long, running adjacent to a nearby highway, out of which stretches ugly, deformed, and white withered tree stubs against the passing cars. It was not always of such a horrid semblance; the storm made it that way. Miles and miles and miles of pale, morbid ugliness. It stretches on and on, while nobody even desires to glance at it. They are withered I say, and eroded by the inclement elements of wind, rain, thunder, and time.
It was the 23rd of August, in 1992. All the windows in the city had been shuttered; doors bolted; refrigerators stuffed; candles prepared; innumerable matches and lighters in multiple drawers; batteries packed inside the shafts of yellow flashlights; cans crossed with can openers; portable radios set up in living rooms; sons and daughters and mothers and fathers sitting rigid like mummified corpses, in front of their TV screens; the eye drew closer and closer and closer; the houses resembled the dull barracks of an immense encampment.